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sábado, 8 de diciembre de 2018

Sólo cuando amamos somos inmortales



      Porque sólo cuando amamos, nuestra consciencia se libera de nuestro intelecto y se da cuenta de que permanece unida a la Consciencia Universal. Unida a aquella realidad a la que todos pertenecemos, lo creamos o no. Es como creer que una célula pertenece a nuestro cuerpo o no. O como creer que el sol existe o no. Ni a nuestra consciencia, ni a nuestra célula, ni al sol, les hacen falta que creamos en ellos para que existan. Son; eso es todo. Son porque tienen esencia, substancia y existencia.

Cambio todo por una sola cosa


¿Hay una sola cosa por la que valga la pena perderlo todo?

Hace un ratito, cuando salí de mi meditación, quería resistir la tentación de escribir  es mi manera de comunicarme ya que hace mucho que vivo casi totalmente aislado y en el presente solo; en el medio del campo. Pero aquí estoy; formulándome -una vez más- la cuestión más importante para mí: ¿Hay en mi vida al menos una cosa por la que valga la pena perderlo o abandonarlo todo?
Y caen otras preguntas:

viernes, 7 de diciembre de 2018

martes, 27 de noviembre de 2018

Alómatas, Mánips y Krifés



De pronto el grito ¡Alóomataas! otra vez se oyó fuera del refugio donde habitaban los Krifés…; el eco recorrió todos los rincones de aquella caverna. Los vigías entraron corriendo y accionaron los interruptores que cerraban las puertas;

jueves, 8 de noviembre de 2018

Lo que la vida me dio y la vida me quitó

¿Sabéis?
Yo me había muerto.
Había habitado en la Tierra.
Y ya había ‘descansado’ en otro mundo, de otro universo, de otra dimensión.
Se me ofrecieron varias alternativas de vida en otros no-espacios y no-tiempos, pero debía reencarnarme.
Dije: donde he estado recientemente hago falta…Quiero volver a la Tierra.
Fui preguntado:

La Finca me despide





Los Enebros” me despide

 Acababa de vender la Finca (Los Enebros); después de haber vivido permanentemente en ella, en medio del monte mediterráneo 15 años.

    Mañana –cavilaba- cenaremos.

     Y luego aquí; a vivir, a sentirnos, a prometernos otra vida. Estaremos un rato afuera, por la noche…

     Una mujer y un hombre se hundirán profundamente en el infinito y saborearán a Dios, re-formarán parte del universo y al mismo tiempo que desearse, anhelarán no separarse jamás de esa unión intensa, profunda.
     Y sin saber por qué, el corazón comenzó a dirigirse a mi razón...

miércoles, 7 de noviembre de 2018

Dejé a Dios en paz I







     Desde mi adolescencia, sufrí mil conflictos al ver las contradicciones de aquellos que se proclamaban representantes de Dios en la Tierra, ministros de Jesús, difundidores de su palabra y afirmantes de que eran sus seguidores; pero –en los hechos- jamás se comportaban como sus imitadores. Imitarlo es vivir en la práctica sus valores y principios de vida.
     Dejé el Seminario;

Lumbremente

Sólo cuando amamos somos inmortales

       Porque sólo cuando amamos, nuestra consciencia se libera de nuestro intelecto y se da cuenta de que permanece unida a la Conscien...